8/9/10

El infinito

Existe.

Existe y es la máxima tristeza, el dolor insoportable, la muerte.

Convócalos y estarás convocando al mismo infinito, que no tiene la forma del recorrido de un ocho descansando, sino del punto donde se cruzan sus curvas.

Donde las distancias desaparecen y el que lo sufre se encuentra totalmente solo en la oscuridad.

Él consigue que el compañero de cama que ahora te abraza parezca a kilómetros de distancia y que la persona que observa cómo tu cuerpo se convierte en agua inflamada desaparezca en una masa negra, informe.

El infinito es el ensimismamiento del pecador enloquecido, el segundo antes de que al quemado vivo se le pare el corazón, la pura necesidad de desvanecerse.

Congratúlate pues, querido lector, si alguna vez has tenido tales sensaciones: eso significa que has conocido el infinito en tu mundana e insignificante vida.

Patricia López 'Red, black, lonesome'