7/6/08

La semana fantástica

La última serie de siete días ordenada al final de mayo (+ período anticipatorio) se puso al revés: fui muy feliz, porque convertísteis el pavimento gris de mi ciudad en mermelada de fresa, en junglas africanas, en arco-iris centelleantes.

El parquet ha dejado de ser flotante, ahora palpita bajo nuestros traseros al ritmo de pisotones al ritmo de pisotones, mientras los grandes ventanales se volvían translúcidos, como si cincuenta personas hubieran hecho el amor en torno a una batería con el crash agujereado.

No hablo solamente de Noah, Brian, Daen, Bradford, Robert, Michael, John, Jed o el sudoroso Brandon, sino de Bonrostro, Jorge, Miguelón, Ruth, Juanjo, Fernando, Paula, Hugo, Carreño, Carla... Todas esas personas que han hecho especial el Véral con su trabajo, con su paciencia y presencia, con su locura, con su inmensa creatividad, con su risa, con su frescura, con un huequecillo entre las piernas (ay, malpensantes!) o con una sesión truchetti en el Borsa.

Sé que no soy la única que lo ha sentido así... Ladrones, me habéis robao o coraçao!!

(Refuerzo visual cutre de las sensaciones descritas en el primer párrafo) Oh, yeah!

7 comentarios:

d. (a.k.a. Mr. Perfumado) dijo...

y yo que me lo perdí! mecachis... pero me encanta verte tan efervescente! un besazo :)

sparkle sista dijo...

Otro para ti, guapo!

Colectivo Laika dijo...

Muchas gracias por sus palabras. El Colectivo Laika al completo (Kandinsky, O-Misha, Tachenko y Koba) se lo agradecen.

Jorge Onecha dijo...

ay, que me emociono... ¡nah! ¡muerte al buen rollito! ^_^

Anónimo dijo...

Viva el Sparklesismo.
No digo más.
Manu.

sparkle sista dijo...

Queda claro que hay ciertas cosas que son 0 cool:

1. No usar pseudónimos. Error imperdonable! Cedo mis lorzas para que o-misha, d. o gonay las fustiguen en público sobre el entarimado de la Pza. Universidad.

2. Hablar con entusiasmo sobre cualquier cosa que tenga que ver con esta ciudad. Por favor, si es Valladolor! Lo peor. O sea. Yo NO creo en la bondad de sus gentes.

3. Bailar y hacer el pelele en los conciertos. Estás faltando al respeto al/los/las/la artista/s, hombrepordios. Mejor quedarse quieto, mirada (y pensamiento) extraviados, en esa mueca ensimismada que nos sienta tan bien a los indies.

Es que me dejáis sola y me creo que vivo en un anuncio de Cacharel, como Manu... ;P

Vgrant dijo...

Imposible no sentir que a uno le han robado el corazón, aun un par de meses más tarde, cuando por fin se empieza a asimilar la super descarga de sensaciones.

Eso sí, si no fuera tan tristemente significativo, lo mejor de todo sería la garantía de encontrarse siempre a los habituales en cada nueva ocasión. Ya más que de habituales se podría hablar de perennes...

¡Y en la próxima vez más y mejor!